El charrúa perdió 4 a 1 frente a Boca Juniors por los 32avos de la Copa Argentina luego de hacer un gran partido.
Sin dudas la diferencia de planteles es muchísima, pero el hambre de gloria hicieron que el equipo rosarino haya dejado todo en la cancha y aguantó lo más que se pudo.
Pese a arrancar perdiendo con el gol de Orsini, el charrúa logró empatar el partido con el gol de Di Vanni de cabeza. A partir de allí Central Córdoba terminó el primer tiempo atacando y generándole peligro a Boca que supo ganar el partido desde la diferencia física.
En el segundo tiempo los matadores se quedaron sin piernas y a partir de allí Boca, con su técnica individual, logró convertir el segundo también por Orsini, y sobre el final llegarían los otros dos goles de Vázquez y Zeballos de penal.
Pese a la derrota, Central Córdoba hizo un gran partido lo cual destaca que tiene con que pelear el torneo de Primera C en busca del ascenso a la Primera B metropolitana.