Las forestaciones y urbanizaciones llevadas a cabo durante este siglo a lo largo de la Costa Atlántica Bonaerense han contribuido a la modificación del ecosistema nativo. Así, las grandes extensiones de dunas que constituían el paisaje original en estas costas, fueron mermando en la medida en que se iban desarrollando las diversas localidades turísticas de la Provincia de Buenos Aires.
La Reserva Natural Faro Querandí constituye la última porción importante del ecosistema de Dunas costeras que se encuentra en su estado natural, resguarda gran cantidad de especies, algunas endémicas como la lagartija de las dunas (Liolaemus multimaculatus) y el Tuco-tuco (Ctenomys talarum), otras raras como la Orquídea de los bajos (Habenaria
burkartiana) y algunas en peligro de extinción como la Monjita dominica (Xolmis dominica). Muchas de ellas constituyen recursos actuales o futuros de notable importancia como lo son las plantas medicinales.
Actualmente el área se está revalorizando porque su existencia garantiza el flujo de sedimentos (arena) tan necesario en las playas que se encuentran al norte en donde se manifiestan importantes signos de erosión costera. Otro atributo importantísimo es el reservorio de agua potable que existe bajo las dunas.
La Reserva Natural Faro Querandí, tierras con dominio a cargo de la Municipalidad de Villa Gesell, está constituida por 5757 hectáreas de dunas y pastizales junto con una extensión sobre ella de 21 km., y tiene un ancho variable de 4 km., donde la amplitud de las playas es uno de los rasgos más característicos.
Creada por Ordenanza Nº 1487 en el año 1996, con el objetivo de “conservar la biodiversidad y el ecosistema de dunas costeras en su estado natural”, la misma se encuentra conformada por ambientes de dunas, bañados, pastizales y playa.